Duele todo el cuerpo

Hombre, 56 años. Quejas de dolores en todo el cuerpo, espalda, rodillas, hombros, duerme muy mal (no más de 4 horas). El estado ha empeorado especialmente en los últimos 4-5 años.

Examen objetivo: el paciente se encorva, todos los movimientos son pesados, rígidos. El volumen de movimientos en el cuello, hombros, rodillas está fuertemente limitado, la limitación es elástica (muscular). A la palpación, la mayoría de los músculos son dolorosos, provocando un dolor reflejo característico. En la columna torácica, de la que más se queja el paciente, los músculos paravertebrales están tensos y son fuertemente dolorosos a la presión, sus vértebras correspondientes están bloqueadas y no se mueven. En las rodillas, la segunda queja más importante, la flexión es menos de 40°, la limitación es muscular, asociada a un dolor a lo largo de la superficie anterior del muslo (músculo cuádriceps femoral).

Diagnóstico: disfunciones dolorosas miofasciales múltiples, trastornos de la movilidad, trastornos articulares y del segmento motor de la columna vertebral causados por ellas, estado similar a la fibromialgia.

Tratamiento: terapia neuromuscular de los músculos paravertebrales, espalda, cuello, liberación miofascial del cuello, transición cervicotorácica, relajación postisométrica de los músculos de las piernas, preparados de magnesio, vitaminas del grupo B (para la normalización de los procesos metabólicos en los músculos, reducción de la tensión).
☛  Tratamiento neuromuscular - terapia NMT

Resultados: a partir de la segunda sesión, mejora lenta pero constante del estado, después de siete sesiones - desaparición del dolor de espalda habitual, mucha más facilidad para subir y bajar escaleras, y lo que agradó especialmente al paciente - sueño profundo (8 horas).

¿Por qué me duele todo el cuerpo? Conclusiones.

El estado del paciente se podría caracterizar como discapacidad - cada movimiento es doloroso, casi todas las partes del cuerpo duelen periódicamente, incluso por la noche no hay respiro, la mañana de cada nuevo día comienza con fatiga y dolor. Y la causa principal de esta condición es un problema tan "sin importancia" como el trastorno muscular y, más concretamente, el síndrome de dolor miofascial, que no puede dejar de afectar al dolor articular en curso crónico. En la gran mayoría de los casos, los neurólogos y otros especialistas desconocen, ignoran o malinterpretan este trastorno. Permítanme recordarles que el síndrome miofascial no es ni inflamación ni espasmo, por lo que las posibilidades de curarlo accidentalmente con terapia farmacológica, incluso masiva, u otros métodos estándar son casi nulas.

Grigori Tafi
Osteópata, médico deportivo
15 años de experiencia en osteopatía y terapia manual. Leer más...

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